La molienda acumulada de oleaginosas hasta octubre de este año alcanzó 2.595.203 toneladas, informó la CAPPRO. Esto representa una mejoría de 8% con respecto al promedio para este periodo en los últimos tres años, pero todavía bastante lejos de los mejores registros acumulados que se hayan observado (con varios años anteriores superando los 3 millones de toneladas).

Según el informativo mensual de la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (CAPPRO), en el mes de octubre la industrialización de oleaginosas se ubicó en torno a las 274 mil toneladas, una caída tanto con relación a lo conseguido el mes pasado como con respecto al promedio para ese mes en los tres años anteriores a la sequía.

Estos valores confirman las expectativas negativas que se venían anunciando prácticamente desde inicios del año, ya que a pesar de la recuperación de la producción primaria las condiciones de competitividad de la agroindustria no han mejorado por falta de políticas que así lo permitan. A esto se suman incluso factores externos que han limitado la posibilidad de agregar valor a nivel local, tanto en cuestiones logísticas como el aumento significativo de la demanda por nuestros granos.

USO ESTABLE. La utilización de soja se mantiene baja, con el 65% de la capacidad nominal. La molienda acumulada de soja al mes de octubre del 2023 se ubicó en 2.520.823 toneladas, un incremento del 38% en la comparación interanual, porcentaje que, aunque parezca elevado, es bastante inferior al aumento de la disponibilidad de esta materia prima en el periodo mencionado.

El mencionado volumen de procesamiento implica un aprovechamiento de 65% de la capacidad nominal, un punto porcentual por encima del registro del mes de septiembre, pero muy lejos de los niveles óptimos con los que operaría cualquier fábrica si no tuviera factores que limiten su desempeño.

En el último bimestre del año se espera que la industrialización de oleaginosas sea bastante limitada, ya que los propios registros de agregado de valor y exportación de granos en estado natural dan cuenta de que la mayor parte de la oferta disponible ya ha sido o procesada o exportada, en estos primeros diez meses del 2023.

MENOR AL TERCIO. En el capítulo de Comercio exterior, el informativo de la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (CAPPRO) indica que los productos industrializados representan solo el 28% del complejo soja.

La generación de divisas de productos del complejo soja (que incluye tanto al producto en estado natural como a sus derivados industriales) hasta el mes de octubre ya supera los US$ 4.226,74 millones, un incremento del 88% con relación al mismo periodo del 2022, un porcentaje que se encuentra en línea con lo que se podría esperar con la recuperación de la producción de esta oleaginosa luego de la sequía del año pasado.

El mencionado valor de divisas representa un 42% de todo lo generado por las exportaciones registradas en el país, 15 puntos porcentuales por encima de lo que se registró a octubre del 2022.

De los más de US$ 4.200 millones solo el 28%, unos US$ 1.190 millones, corresponden a lo generado por las exportaciones de aceite, harina y cascarilla de soja, un incremento de 11% con respecto al décimo mes del año pasado, porcentaje inferior a la variación en la industrialización en el periodo.