La entrada de hacienda a las ferias de consumo se resintió considerablemente entre el viernes y el inicio de esta semana, situación que favoreció el repunte de los precios promedios del ganado, hasta su máxima escala del mes, junto con la menor participación de hembras y la remisión de lotes de buen peso.
- La entrada del viernes pasado fue la más baja del año para ese día.
- El ingreso de este lunes fue el segundo menor en lo que va del mes.
- Novillos y la hacienda en general en su mayor valor promedio.
- Precios máximos no alcanzan todavía a los del ciclo anterior.
La entrada de hacienda a ferias este lunes sumó 114 cabezas, entre las 4 consignatarias activas. Esa cantidad que se ubica como el segundo menor ingreso diario en este mes y para un lunes, en este año. Esta escasa entrada sigue la tónica del cierre de la semana pasada, cuando se ofertaron solamente 223 bovinos, en la mínima oferta del año para un viernes.
Del total diario ofertado al inicio de este ciclo, solamente el 34% correspondió a vacas, y no hubo ingreso de vaquillas. Ese bajo ingreso es menor en 68% al vigente promedio de oferta en lunes, factor que fue propicio para una animada puja por los lotes ofertados, caracterizados también por un buen nivel de peso promedio.
Los novillos llegaron a un precio promedio de G$ 12.833, sin incluir IVA, que es la nueva mayor cotización en abril para esa clase animal, tras el tope logrado el viernes, aunque el monto máximo fue de solamente G$ 13.400.
Los toros no pudieron mantener su máxima escala alcanzada el viernes y cotizaron con merma del 2%, pasando a una escala promedio de G$ 12.130 y con un precio máximo de G$ 13.160.
La escasa oferta global sostuvo el valor de las vacas, que se vendieron en promedio a G$ 10.487, y con un precio máximo de G$ 11.500, sin aporte de vaquillas.
Con estos altibajos, la cotización promedio diaria de la hacienda en general subió casi 7%, llegando a un nivel de G$ 11.814, que es el más elevado del mercado ferial de ganado para consumo en este mes.
La continuidad del clima lluvioso puede prolongar la escasa entrada de hacienda y el consecuente incremento en los precios del ganado.