Una sequía seguida por heladas intensas provocó daños irreparables en la producción de maíz tardío de Brasil y Paraguay, advirtió Luis Cubilla, asesor agrícola de la Capeco.
Pero mientras los brasileños tienen la logística necesaria para importar el cereal y reabastecerse, los paraguayos no acostumbran emplear recursos con ese propósito.
“Con el maíz se alimenta a la producción avícola y afecta directamente a la cadena alimenticia, pues no se podrá tener huevos, leche, queso, ni productos porcinos”, dijo un alarmado Luis Cubilla, asesor de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco).
“Probablemente, perdamos la zafriña (maíz tardío) de verano si es que esta sequía continúa”, añadió en declaraciones realizadas a Última Hora.
El año pasado la cosecha de maíz comercial en Paraguay fue de 4,50 millones de toneladas y este año, con suerte, esperan levantar al menos 3,0 millones de toneladas, la cifra más baja desde el año 2009, cuando la producción fue de 1,84 millones.
La seca en algunas zonas agrícolas paraguayas es tan intensa que incluso se están registrando incendios que afectan lotes de maíz.
Por otra parte, más allá de lo que se logre cosechar, luego será necesario evaluar la calidad del grano obtenido en función de las difíciles circunstancias desfavorables que experimentó el cultivo en el presente año.
En cuanto al trigo, Cubilla indicó que producción rescatada solo servirá para abastecer al mercado local, que también precisa de trigo de buena calidad para la producción local de harina y panificados.