Generalizada suba de los precios agrícolas hubo este martes en el mercado internacional, hasta nuevos valores récords, no sólo en el año sino también respecto a años anteriores, en varios rubros. Es el caso de la soja en grano y del aceite de la oleaginosa, así como para el maíz, en su valor máximo en 8 años, y para la canola, en una nueva racha alcista histórica.
También hubo mejora de precios para la harina de soja y para el trigo, hasta un nivel no registrado desde la última semana de febrero pasado. La suba de precios alcanzó al algodón y al azúcar, pero en contrapartida el arroz cayó a su mínima cotización en 6 semanas.
La tendencia alcista es atribuida al clima frío y seco en Estados Unidos, en tanto que el informe semanal del USDA sobre el estado de los cultivos indica leves incrementos respecto a igual ciclo del año pasado y de los últimos 5 años.
Fuente: PRO RURAL PY
Cierre del mercado de Chicago
Jornada alcista para los tres cultivos en Chicago, apuntalados por el clima frío que podría perjudicar al desarrollo del trigo y ralentizar las siembras de soja y maíz.
Soja. La soja cierra la rueda con considerables subas y alcanza máximos en siete años, apuntalada por la ajustada oferta en el mercado físico estadounidense, lo cual habría atraído a compradores especulativos que presionaron a los precios.
Al igual que en el maíz, el clima frío en EEUU generaría un retraso en las siembras, dando soporte a las cotizaciones. Además, la robustez evidenciada en los mercados de aceites vegetales y en el mercado de biodiesel también contribuiría a las presiones alcistas.
Maíz. Los futuros de maíz trepan más del 2,5% y alcanzan máximos en casi ocho años.
Las inquietudes que generan, por un lado, el clima seco en Brasil y sus posibles consecuencias en la siembra del maíz de segunda, y por el otro, la persistencia del clima frío en Estados Unidos que ralentiza la siembra y la germinación de los lotes ya sembrados añadieron soporte al mercado.
Trigo. Los contratos de futuros de culminan con ganancias sostenidos por las inusuales gélidas temperaturas en las Planicies estadounidenses, que podrían tener efectos negativos sobre el desarrollo de los cultivos.
Además, las ganancias registradas en los mercados de maíz y soja habrían propiciado un efecto contagio sobre las cotizaciones del cereal, que alcanzó máximos desde principios de febrero.