Los precios mundiales de los alimentos siguen subiendo. En diciembre pasado, el índice de precios de los alimentos de la FAO alcanzó su nivel más alto en cinco años, con una elevada demanda de biocombustibles de aceite de palma y caña de azúcar.
9 de enero de 2020, Roma/FAO – Los precios mundiales de los alimentos aumentaron en diciembre por tercer mes consecutivo, ya que un fuerte repunte del aceite vegetal llevó al Índice de precios de los alimentos de la FAO a su nivel más alto en los últimos cinco años.
El Índice de precios de los alimentos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) alcanzó un promedio de 181,7 puntos durante el mes de diciembre, lo que supone un incremento del 2,5 por ciento con respecto a noviembre y el nivel más alto desde diciembre de 2014.
Para el conjunto de 2019, el índice -que hace un seguimiento de la variación mensual de los precios de los productos alimentarios básicos en los mercados internacionales- alcanzó un promedio de 171,5 puntos, cerca de un 1,8 por ciento más que en 2018, pero todavía un 25 por ciento por debajo de su nivel máximo en 2011.
Aceites. El índice de los precios de los aceites vegetales de la FAO aumentó un 9,4 por ciento respecto a noviembre, subiendo por sexto mes consecutivo. El último repunte se debió una vez más a los precios del aceite de palma, impulsados tanto por una sólida demanda -en especial del sector del biodiesel-, como por la inquietud por la escasez de suministros. A pesar del aumento de diciembre -que también afectó a los aceites de soja, girasol y colza- el subíndice de aceites vegetales había alcanzado en el curso de 2019 su promedio anual más bajo desde 2007.
Azúcar. El índice de precios del azúcar de la FAO aumentó un 4,8 por ciento desde noviembre. El incremento se debió en parte a la subida de los precios del petróleo, que animó a los ingenios azucareros brasileños a utilizar más caña de azúcar para producir etanol, lo que provocó una reducción de la disponibilidad de azúcar en el mercado mundial.
Lácteos. En diciembre, el índice de precios de los productos lácteos subió por su parte un 3,3 por ciento, liderado por los precios del queso, que aumentaron casi un 8 por ciento en medio de una menor disponibilidad para la exportación de la Unión Europea y Oceanía.
Cereales. El índice de precios de los cereales de la FAO aumentó a su vez un 1,4 por ciento, impulsado sobre todo por los precios del trigo debido a la aceleración de la demanda de importaciones de China y los problemas logísticos en Francia a causa de las continuas protestas sociales en el país. Sin embargo, las cotizaciones de los precios del maíz y el arroz permanecieron en general estables.
Carnes. El índice de precios de la carne de la FAO alcanzó un promedio de 191,6 puntos en diciembre, casi sin cambios con respecto a su valor revisado de noviembre. El subíndice terminó el año un 18 por ciento más alto que en diciembre de 2018, empujado por las cotizaciones de la carne de porcino, gracias tanto a la demanda sostenida de importaciones de Asia como a la demanda interna previa a la celebración de las festividades natalicias en la Unión Europea y en Brasil.
Precios de la carne. En diciembre, las cotizaciones de la carne de cerdo aumentaron, ya que continuó la escasez de suministros en el mercado mundial y algunos de los principales proveedores, especialmente la Unión Europea y el Brasil, tuvieron dificultades para satisfacer la fuerte demanda interna previa a las festividades, además de la elevada y persistente demanda de importaciones de Asia.
Las cotizaciones de la carne de ovino aumentaron por noveno mes consecutivo debido a la fuerte demanda de importaciones en un contexto de suministros para la exportación limitados de Oceanía, mientras que las de la carne de aves de corral se incrementaron ligeramente a causa de la escasez de suministros, especialmente del Brasil.
En cambio, las cotizaciones de la carne de bovino cayeron debido al descenso de las compras de China, la principal fuente de demanda durante varios meses.
En general, el índice de precios de la carne de la FAO se situó en un promedio de 175,8 puntos en 2019, lo que representa una subida de 9,5 puntos (el 5,7 %) con respecto a 2018. De las diferentes categorías de carne, los precios de la carne de cerdo registraron el mayor aumento interanual, seguidos de los de la carne de bovino y los de las aves de corral, mientras que los de la carne de ovino registraron niveles inferiores a su promedio anual en 2018.